
Marzo - 2025 | Camilo Tovar | Arquitecto
Errores en la planificación de espacios: Cómo evitar sobrecostos y optimizar cada metro cuadrado
Diseñar la distribución de una vivienda no es solo dibujar paredes y elegir acabados bonitos.
Es una de las decisiones más importantes porque cualquier error en esta etapa se traduce en sobrecostos, incomodidad y, en muchos casos, en la necesidad de hacer cambios costosos más adelante. ¿Alguna vez has visto una casa con pasillos innecesarios o con habitaciones que parecen más pequeñas de lo que deberían? Eso ocurre porque no se planificó bien el uso del espacio.
Si estás en la fase de diseño y quieres sacarle el máximo provecho a cada metro cuadrado sin gastar más de la cuenta, aquí te contamos los errores más comunes que debes evitar y cómo solucionarlos a tiempo.
1. Diseñar sin pensar en la circulación: ¿De verdad necesitas tantos pasillos?
Uno de los errores más comunes al distribuir espacios es no pensar en cómo se moverán las personas dentro de la casa.
A veces, con tal de hacer los ambientes más amplios, terminamos creando pasillos innecesarios o distribuciones incómodas que solo restan funcionalidad.
¿Te ha pasado que entras a una casa y sientes que todo está apretado aunque haya suficiente espacio?
Muchas veces esto ocurre porque los pasillos están mal diseñados o porque la distribución obliga a dar rodeos para llegar a ciertos lugares.
Cómo evitarlo:
✔ Prioriza un diseño que permita un flujo natural entre las habitaciones sin necesidad de largos pasillos.
✔ Piensa en transiciones fluidas: en lugar de un pasillo, ¿podría integrarse ese espacio a una sala o comedor?
✔ Considera el ancho de los pasillos: menos de 90 cm puede hacer que se sientan incómodos, pero más de 1.20 m puede ser un desperdicio de espacio.
2. No medir bien los muebles: Cuando compras el sofá y no cabe
Este error es más común de lo que parece. Muchas personas diseñan espacios con medidas estándar sin pensar en los muebles que realmente van a usar.
Luego, cuando llega el momento de amoblar, descubren que la cama no cabe bien, que el comedor bloquea el paso o que la sala quedó demasiado pequeña para los sofás.
Para evitarlo, no basta con decir "aquí irá la sala" o "aquí cabe una cama doble". Hay que medir y asegurarse de que el espacio realmente funcione.
Cómo evitarlo:
✔ Antes de definir el tamaño de una habitación, haz un boceto con los muebles a escala.
✔ No solo midas el espacio en sí, sino también las áreas de circulación. Un sofá puede caber, pero si deja un paso de 30 cm, será incómodo.
✔ Si tienes muebles grandes o con medidas especiales, tenlos en cuenta desde el inicio del diseño.
3. Olvidarse de la luz y la ventilación: ¿Por qué mi casa es tan oscura y calurosa?
Nada peor que tener un espacio bonito pero oscuro o que en verano se vuelva un horno porque las ventanas están mal ubicadas.
La orientación de la luz y la ventilación es clave para que una casa sea agradable y eficiente en consumo de energía.
Un error común es colocar ventanas en direcciones donde el sol pega demasiado fuerte, lo que hace que el espacio se caliente más de la cuenta.
O, al contrario, no incluir suficientes entradas de luz natural, lo que obliga a tener luces encendidas todo el día.
Cómo evitarlo:
✔ Analiza la orientación del terreno antes de ubicar ventanas y puertas.
✔ Prioriza la luz natural en áreas sociales como la sala y el comedor.
✔ Aprovecha la ventilación cruzada: colocar ventanas en lados opuestos permite que el aire circule mejor y evita el uso excesivo de aire acondicionado.
4. No pensar en almacenamiento: ¿Y ahora dónde guardo todo?
Uno de los mayores arrepentimientos en el diseño de una casa es no haber previsto suficiente espacio de almacenamiento.
En el papel, todo se ve bien, pero cuando llega el momento de vivir en la casa, te das cuenta de que no hay dónde guardar cosas y terminas llenando los espacios con muebles improvisados.
Los armarios, estanterías y muebles con almacenamiento oculto son esenciales para que una casa se vea ordenada y funcional.
Y no, no se trata de hacer habitaciones más grandes, sino de distribuir mejor el espacio que ya tienes.
Cómo evitarlo:
✔ Diseña armarios empotrados desde el inicio para aprovechar mejor el espacio.
✔ Considera almacenamiento en lugares poco utilizados, como debajo de escaleras o en pasillos anchos.
✔ Opta por muebles multifuncionales, como camas con cajones o mesas de centro con compartimentos.
5. No pensar en el futuro: Diseñar solo para hoy puede salir caro mañana
Es normal pensar en el presente al diseñar una casa, pero ¿qué pasa en cinco o diez años? Las necesidades cambian, la familia crece y lo que hoy parece suficiente podría no serlo en el futuro.
Por ejemplo, hoy puedes no necesitar una habitación extra, pero si en unos años quieres un estudio o un cuarto de juegos, ¿tendrás espacio para hacerlo? Lo mismo ocurre con la cocina, los baños y las áreas sociales.
Cómo evitarlo:
✔ Diseña espacios versátiles que puedan adaptarse con el tiempo.
✔ Deja áreas con posibilidad de ampliación o redistribución.
✔ Usa materiales y acabados duraderos para evitar remodelaciones frecuentes.
Conclusión: Diseñar bien desde el inicio te ahorra dinero y dolores de cabeza
Planificar bien la distribución de tu hogar no solo hace que los espacios sean más funcionales, sino que también te evita gastos innecesarios en el futuro.
Cada metro cuadrado cuenta, y evitar estos errores desde el inicio hará que tu inversión valga la pena.
Si estás en la fase de diseño, tómate el tiempo necesario para analizar cada detalle y, recuerda que en Camilo Tovar Arquitectura te asesoramos, y nos encargamos de cada etapa de la remodelacion, construccion y diseño de tu casa.